domingo, 11 de diciembre de 2011

Dinero caído del cielo

Durante la era de la depresión, en Chicago, Arthur Parker, un vendedor de partituras musicales casado con Joan, conoce en una tienda de música a Eileen, una maestra de escuela...


El 11 de Diciembre de 1981, hace hoy 30 años, se estrenaba en Los Ángeles (California) “Dinero caído del cielo” (Pennies from heaven), un extraordinario y genuino musical producido por Herbert Ross y Nora Kaye para la Metro Goldwyn-Mayer.

El guión de "Dinero caído del cielo", firmado por Dennis Potter, estaba basado en la homónima serie de televisión escrita por el propio Potter en 1978. Y el título original de la película hacía referencia a una canción, “Pennies from heaven”, maravilloso tema escrito en 1936 por Johnny Burke y Arthur Johnston e interpretado por Bing Crosby en la película de mismo nombre y año. 


La impecable fotografía de Gordon Willis, que anteriormente nos había regalado las imágenes de “El Padrino”, “Todos los hombres del Presidente”, “Annie Hall”, “Manhattan” o “Recuerdos”, y la no menos excepcional dirección artística de Bernie Cutler y Fred Tuch, se unían a una exquisita banda sonora adaptada por Ralph Burns, Marvin Hamlisch y Billy May. Una auténtica delicia.


Y a una magistral dirección de Herbert Ross, cineasta americano que ya nos había dejado en la gran pantalla reconocidos títulos como “Adiós, Mr. Chips”, Sueños de un seductor”, “Elemental, Dr. Freud”, “Paso decisivo”, “La chica del adiós”, “California Suite” o “Nijinsky”.


Rostro ya entonces conocido en su país a través de la pequeña pantalla, Steve Martin tan sólo había intervenido en tres películas cuando le ofrecieron dar vida a Arthur Parker, primer papel dramático al que se enfrentaba, por otro lado, el actor.


Steve conocía la serie original, a la que había catalogado como lo mejor que había visto nunca, y aceptó al momento. Martin eligió este personaje dejando libre su otra oferta paralela: el Indiana Jones de “En busca del arca perdida”. Sí, en el cine también hay ángeles de la guarda...


Bernadette Peters  procedía asimismo de la televisión, aunque llevaba ya más títulos cinematográficos que Martin. Peters nos ofreció una maravillosa recreación de Eileen, su personaje.


Al igual que hizo Jessica Harper con el suyo, Joan. Harper llevaba desde 1974 en la gran pantalla y había sido ya dirigida en dos ocasiones por Woody Allen.

Yo quiero vivir en un mundo donde las canciones sean reales

Y yo, Arthur, y yo. Las canciones, y los bailes que traen consigo, son personajes de lujo en “Dinero caído del cielo”.


Inolvidables melodías como “The glory of love”, escrita en 1936 por Billy Hill y representada en la película por los dos actores protagonistas. O como Did you ever see a dream walking”, escrita en 1933 por Harry Revel y Mack Gordon y cantada por el mismísimo Bing Crosby.


O “Life is just a bowl of cherries”, escrita en 1931 por Ray Henderson, Buddy G. DeSylva y Lew Brown, interpretada por Walter S. Harrah, Gene Merlino, Vern Rowe, Robert Tebow y Al Vescovo y representada aquí por Bernadette Peters, Steve Martin y Jessica Harper.



O “Let’s face the music and dance”, precioso tema compuesto en 1936 por Irving Berlin para que lo bailaran Fred Astaire y Ginger Rogers en "Sigamos la flota" que recrean maravillosamente aquí Steve Martin y Bernadette Peters.




Y es que “Dinero caído del cielo” también nos regala excelentes escenas de baile. Como la que nos ofrecen el propio Steve Martin, Robert Fitch y Tommy Rall (inolvidable Flor de “Siete novias para  siete hermanos”) al son de “It’s the girl”, canción compuesta en 1931 por Abel Baer y Dave Oppenheim e interpretada aquí por The Boswell Sisters and The Dorsey Brothers Orchestra.



O la que nos brindan Bernadette Peters y los fabulosos niños de su escuela a través de “Love is good for anything that ails you”, tema escrito en 1937 por Cliff Friend y Matty Malneck e interpretado por Phyllis Robins con el fondo de Orlando and his orchestra.


La excelente coreografía de “Dinero caido del cielo” era creada por Danny Daniels, bailarín americano de musicales de Broadway de los años 40, como “Street Scene” o “Kiss me, Kate”, que continúo su andadura durante la posterior década, paseándose también por el cine y la televisión. Daniels obtuvo un Tony Award y un Astaire Award en 1984 por “The Tap Dance Kid” y recibió tres nominaciones más a los Premios Tony.


Danny Daniels fue mi profesor de tap dancing en el colegio, yo tenía doce años... Y él le dijo a Herb Ross ‘¿Sabes que Christopher Walken sabe bailar tap dance?’”


Christopher Walken llevaba en la gran pantalla desde 1969 y ya le habíamos admirado en “Próxima parada, Greenwich Village”. “Annie Hall”, “El cazador”, “La puerta del cielo” o “Los perros de la guerra”.

Considero “Dinero caído del cielo” como un punto importante en mi carrera. Estoy muy contento de haberla hecho porque fue el último musical de la MGM. Bailé en el mismo suelo que Fred Astaire, Gene Kelly, Donald O’Connor...



Walken aparece en “Dinero caído del cielo” en una única pero excepcional escena de baile a ritmo, nada menos, que de Cole Porter y su “Let’s misbehave”, canción escrita por el genial compositor en 1927 e interpretada por Irving Aaronson and his commanders.



Este exquisito número musical llevó dos meses de ensayo y dos días de rodaje. El actor afirmaría más adelante que fue muy elogiado por los seguidores de Fred Astaire y Gene Kelly. Muy grande Walken, muy grande.


Y también dejaba su huella en la película Vernel Bagneris, dramaturgo, actor, director, cantante y bailarín nacido en Nueva Orleans (Louisiana) que interpretaba en “Dinero caído del cielo” a un mágico personaje unido a un acordeón.


Bagneris nos regala el maravilloso número musical que da nombre a la película, “Pennies from heaven”. Pura magia.


Dinero caído del cielo” fue nominada al Oscar al mejor guión adaptado, mejor diseño de vestuario y mejor sonido, aunque no se hizo con ninguna de las tres estatuillas.


Entre otros premios y nominaciones, recibió el Globo de Oro a la mejor actriz (Bernadette Peters), siendo nominada también como mejor película y como mejor actor (Steve Martin).


Al menos cuatro famosos cuadros fueron recreados como “pinturas vivientes” en la película. Nighthawks” y “New York Movie”, ambos de Edward Hopper, y “Hudson Bay fur company” y “Twenty cent movie” de Reginald Marsh.


Ah, y los peniques que llovían del cielo eran en realidad lentejuelas de ese mismo tamaño, que siguieron apareciendo por las esquinas de las calles de los estudios MGM durante casi un año después de finalizado el rodaje.

Siempre pasa lo mismo… Sales del cine y el mundo sigue igual
(Arthur Parker)

13 comentarios:

Sergio Sánchez dijo...

Uno de los números de la historia del musical que más me fascinan es ese inolvidable "Let's face the music and dance" que recrean Steve Martin y Bernadette Peters, que al contrario que el de Astaire y Rogers tiene una coda final que sugiere el desenlace al que nos dirigmos. La película es una verdadera joya imposible de repetir, desde luego "El detective cantante" que hizo Downey jr hace unos pocos años para mi estaba muy lejos.

Manderly dijo...

La tengo pendiente. Sicen que no es una gran película pero como me gustan este tipo de musicales tengo gans de verla. Se ve que copia a los grandes clásicos.
Un saludo.

Pepe Cahiers dijo...

No la he visto, pero Herbert Ross siempre me pareció muy interesante, sobre todo con esas dos propuestas, especialmente inspiradas, que fueron "Sueños de un seductor" y la muy entrañable "La chica del adiós", dos comedias realmente buenas.

A-B-C dijo...

Tiene una pinta estupenda. Tienes razón que debe haber como una especie de "ángeles" que cuidan del cine porque, aunque veo perfectamente capaz a Steve Martin de hacer de Indi, no sé que sería de Indi sin Harrison Ford, la verdad. ¡Qué curioso C. Walken en una escena de danza!!! solo por eso ya me apetece aunque todo lo que has contado la hace muy apetecible.

Tomo nota.

Por cierto y aunque no viene a cuento, ya vi El viaje de Chihiro y me encantó, como el mundo mágico-simbólico de los sueños

Clementine dijo...

El “Let’s face the music and dance” de Astaire y Rogers es sencillamente magistral, Sergio. Y con música de fondo de Irving Berlin, ¿qué más se puede pedir? Tú lo has dicho, esta película es una joya, una delicia de musical.

Sí es una gran película, Manderly, porque está muy bien hecha en todos los sentidos. Y ya si te gustan los musicales clásicos, la disfrutarás el doble.

Pues, Cahiers, ya sé que a ti no te van mucho los musicales, pero éste bien merecería una revisión por tu parte, y más gustándote Herbert Ross, porque está impecablemente hecha y es muy distinta a todo lo visto en este género.

Yo no puedo (ni quiero) imaginar otro Indi que no sea Harrison Ford, A-B-C, y me pasa lo mismo con el personaje de Han Solo. Y ya ves como se defiende Christopher Walken. En cuanto a Chihiro, siempre viene a cuento en esta gran pantalla, me alegra que te haya gustado y no me extraña, es maravillosa.

Saludos a todos.

miquel zueras dijo...

Me entusiasma Herbert Ross desde que en TV-3 emitieron sus series musicales "El detective cantante" y "Pintalabios en el cuello", no sé si las pusieron en alguna otra televisión local. Desde luego Steve Martin está aquí mucho más brillante que en las comedias tontorronas que suele protagonizar.
Además de sus filmes con Woody Allen conocía a Jessica Harper de otro musical nada convencional "El fantasma del paraíso" de Brian de Palma, otra película que me encanta. Besos. Borgo.

Clementine dijo...

No conozco yo esas series musicales de Ross que citas, Miquel, indagaré. A mí no me gusta Steve Martin, no me hace ninguna gracia además, pero el papel que hace aquí realmente lo borda. Tomo nota también de "El fantasma del paraíso", tampoco la conozco.
Oye, y te dejas a Christopher Walken, que su baile en esta película estaba en tu selección de escenas para recordar, que me acuerdo yo. Besos, Borgo.

Marcos Callau dijo...

Excelente, Clementine, me muero de ganas por verla. La verdad es que, contando con esa banda sonora, parece coser y cantar hacer un buen musical. Yo soy de los que piensan que Steve Martin es un buen actor cuando lo dirigen bien y goza de buenos papeles y creo que aquí me va a entusiasmar. Por cierto, es un lujazo también contar con Billy May como arreglista, ya que es uno de los responsables del éxito de Sinatra, nada menos. Besos!

Clementine dijo...

Bueno, Marcos, es que a ti te va a chiflar esta película, seguro. Steve Martin es buen actor, pero a mí no me resulta gracioso, el papel que hace aquí es dramático y lo hacer realmente bien. Y mira, no sabía yo lo de Billy May y Sinatra. Pues lo dicho, consíguete este musical porque lo vas a disfrutar y mucho. ¡Más besos!

Alicia dijo...

Bueno, ya sabes que esta peli me dejó loca cuando la vía hace ya años. Y el baile de Walken es de esas escenas que no me canso de ver y rever y rererever.
Me ha gustado muchísimo la recreación del cuadro de Hopper, eso es homenaje con mayúscula (HOMENAJE)
Digo yo que en esta casa se te acumula el trabajo en cuanto te das media vuelta...

Clementine dijo...

Pues date la vuelta entera, Alicia...

Roberto Béjar dijo...

Jejejeje... Pues mira por dónde que a mí me cae bien Steve Martin... Así que me la apunto. Ahora, los remakes de "La pantera rosa" que ha hecho me parecen horrorosos.

Saludos!

Clementine dijo...

Hola, Roberto. A mí Steve Martin no me cae ni bien ni mal, sencillamente no me hace gracia, aquí está sensacional y la actriz protagonista aún mejor. Apúntatela, tiene muy buena factura. Y, yo a lo tuyo, la banda sonora te va a apasionar, ya lo verás. Besos.