lunes, 15 de febrero de 2010

Antonio Mercero, un honor para el Premio Goya

Yo me licencié en Derecho por la Universidad de Valladolid en 1958 y en el 59 me vine a Madrid, donde ingresé en la Escuela Oficial de Cine. Obtuve el diploma de director de cine en 1962 y a partir de ese momento empezó mi lucha


La Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España concedió ayer el Goya de Honor 2010 a Antonio Mercero por "su inmejorable carrera cinematográfica, repleta de éxitos y de experimentos interesantes en campos tan amplios como el cortometraje, el mediometraje y el largometraje".

Director y guionista nacido el 7 de marzo de 1936 en la localidad guipuzcoana de Lasarte, Mercero debutó en 1962 con el cortometraje “Lección de arte”, una curiosa mezcla de imagen real y rudimentarios dibujos animados hechos por Mingote. Corto por el que Antonio obtuvo la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián y el galardón del Círculo de Escritores Cinematográficos.


Y mi lucha fue muy dura en los primeros años, pero tuve la suerte de que, allá por los setenta, empecé a tener dos vidas: el cine y la televisión. Si me iba mal el cine, trabajaba en televisión, si en ésta algo fallaba, dirigía películas. Y así ha sido mi trayectoria profesional, una alternancia de esas dos vidas. Y las llamo vidas, porque para mí hacer cine y televisión es vivir apasionadamente

Se inició en el mundo del largometraje un año después con “Se necesita chico”. Entre sus trabajos posteriores para la gran pantalla, títulos como “Las delicias de los verdes años”, “La guerra de papá”, “Espérame en el cielo”, “La hora de los valientes”, “Planta 4ª” o “¿Y tú quién eres?”.


En palabras de la Academia “es autor de un cine con un sello personal, cómico y a la vez tierno, con una obra que se ha convertido en el patrimonio sentimental de muchos españoles".

Antonio Mercero también se ha asomado a la escena teatral con “Isabel, reina de corazones” (1984), “Los verdes campos del Edén” (2004) y el monólogo “Los cojos no trotan” (2005).


Y, a través de la pequeña pantalla, nos ha legado series tan populares y entrañables como “Crónicas de un pueblo”, “Este señor de negro”, “Verano azul”, “Turno de oficio” o “Farmacia de Guardia”.


Sin olvidarnos, por supuesto, de “La cabina” (1972), un inquietante mediometraje protagonizado magistralmente por José Luis López Vázquez con el que Mercero obtuvo, entre otros galardones, un Premio Emmy.


Estar tras una cámara teniendo delante de mí a unos seres humanos a los que vas modelando, consiguiendo que sean como tú quieres que sean, que digan las palabras con la emoción que necesitas, que cuenten las historias que tú quieres contar taladrando con sus ojos el aire, conseguir eso, es totalmente placentero. En esos instantes eres como un pequeño dios en plena creación y eres absolutamente feliz


Enhorabuena, Antonio, por este merecidísimo reconocimiento y por tu completa y polifacética carrera.

Y gracias por transmitirnos esa entrañable humanidad.

5 comentarios:

Caratulina dijo...

Mi enhorabuena por ese merecidísimo Goya. Y gracias a tí por recordarnos que era merecidísimo.
¿Cuantas veces habré visto La Guerra de papá? Pues anda, que Verano azul..

Clementine dijo...

Y "Crónicas de un pueblo", que yo no la pude ver en su momento pero sí después en una reposición, sigue teniendo un encanto especial.
Y ayer me vi "Planta 4ª", que no la conocía, y está muy bien tanto la historia como la dirección de actores, sobre todo los tres chicos principales.
Y "La cabina". Y "La hora de los valientes". También son muy recomendables.
Pues sí, es un merecidísimo premio.

Wolffo dijo...

¿Sabes? Llevo unos días alejado de los blogs de cine que leo (son dos, este y el otro) porque me pone bastante enfermo todo ese asunto de los Goya y los Oscar. Me dan igual completamente... bueno, no me dan igual, me fastidian muchísimo.
Antonio Mercero, imagino que se lo merece y todo eso, pero es culpable, también, no lo olvidemos, de haber hecho "Verano Azul" y "Farmacia de Guardia" y sólo por eso merecería, por lo menos, una buena reprimenda.
Es broma (aunque las dos mencionadas series me hacen vomitar), porque es verdad que es un hombre con talento y con sensibilidad y si hay que alegrarse del goya, se alegra uno, hombre, pero yo daría estos premios a esta gente, que son grandes, antes de que enfermen, o mueran, y se pongan malitos, hombre, que queda feo.
Me gustó ver en el cine "Espérame en el cielo", y en la tele, "Crónicas de un pueblo" y "Turno de oficio", además, claro, de "LA cabina".
Y además, es un tipo que cuando habla... te cae bien, ¿no?
En fin, pues nada, eso, que un beso gordo, y un post interesantísimo, como siempre.
Otro beso.

Clementine dijo...

Yo me alegro un montón de que le hayan dado el Goya de honor porque, de alguna manera, le reconocen el buen trabajo de toda su vida.
Y creo que es un director que ha sabido conectar perfectamente con el espectador, tanto en el cine como en la televisión. Sus series pueden tener mayor o menor calidad, pero siempre han tenido muy buena audiencia televisiva. Eso ya es un gran logro.
Pues sí, es un señor además que le oyes hablar y te cae bien. Y que ha sido grande y no ha alardeado de ello. Que eso también le honra.
Pero a mi tampoco me gusta el que den un premio de este tipo cuando la persona homenajeada está enferma o, simplemente, ya no está. Porque ahí no le estás sólo reconociendo sencillamente su buen trabajo.
Y tampoco me gusta que, al día siguiente, los periódicos saquen en portada en foto grande a Almodóvar y su reconciliación con los Goya, y no a Mercero y su Goya de Honor. No tengo nada contra Almodóvar, pero creo que fue más importante en esa noche Mercero. Digo yo.
Y ya no digo más, que voy a tener que abrir otro post.
Besos.

Wolffo dijo...

En lo de almodóvar tienes toda, pero toda la razón.
Y en más cosas, pero no te la voy a dar en todo...