Ha pasado un año ya desde que nos dejó Rafael Azcona. Lejos de hacer un exhaustivo análisis de su vida y obra, y respetando su deseo (él no quiso nunca convertirse en personaje público), trazaré su trayectoria en tan sólo diez pinceladas:
1. Rafael Azcona era un niño al comenzar la Guerra Civil. Su Logroño natal quedó en la llamada España nacional, territorio en el que la enseñanza se dedicaba preferentemente a la formación de escolares política, patriótica y confesionalmente correctas.
Había, pues, criaturas educadas para ser ejemplares. A Rafael le tocó padecer a alguna de ellas y, años después, ya colaborador de "La Codorniz", las personificó en el repelente niño Vicente. El personaje tuvo un descriptible éxito. Durante algún tiempo se popularizó la frase: "Eres el repelente niño Vicente".
Había, pues, criaturas educadas para ser ejemplares. A Rafael le tocó padecer a alguna de ellas y, años después, ya colaborador de "La Codorniz", las personificó en el repelente niño Vicente. El personaje tuvo un descriptible éxito. Durante algún tiempo se popularizó la frase: "Eres el repelente niño Vicente".
2. El humor en circunstancias desfavorables era una marca de estilo en sus escritos. Aprendió de los humoristas de aquellos años - Mihura, Neville, Tono - y vivió la bohemia del café Varela, donde se escribía a máquina en los veladores de mármol y un otorrino pasaba consulta ("En sus divanes podían soñar los poetas - presuntos o no - sin consumir nada. Y con derecho a jarra de agua fresca y a consultar el BOE").
3. Renegó de distinciones como ser jurado en Cannes ("No me gusta ofrecerme en espectáculo, y no por modestia, sino porque lo paso mal físicamente").
4. Su carrera literaria la sacrificó por el cine ("Ser un escritor frustrado es comodísimo, no hay que preocuparse por los adjetivos, que en el cine quedan a cargo del director, aunque a veces los administre el productor").
5. La idea de "El cochecito" surgió observando Azcona a un grupo de inválidos que salían del Bernabéu echando pestes del Madrid.
5. La idea de "El cochecito" surgió observando Azcona a un grupo de inválidos que salían del Bernabéu echando pestes del Madrid.
6. Azcona odiaba los contrastes ("Aparecía en pantalla un sitio cálido, unos padres comprensivos, refrescos enormes. Y luego salías a la realidad. Como no soy masoquista, no iba al cine").
7. Había empezado a leer los periódicos con 7 años ("Desde entonces, nunca me ha faltado una guerra en el desayuno, y en esas guerras siempre han salido perdiendo los que no tenían ningún motivo para hacerlas").
8. Desde su primera colaboración en el cine con "El pisito" de Marco Ferreri, Azcona patentó la expresión "hablar el guión", que resume su método de trabajo, participativo y locutorio con sus realizadores.
8. Desde su primera colaboración en el cine con "El pisito" de Marco Ferreri, Azcona patentó la expresión "hablar el guión", que resume su método de trabajo, participativo y locutorio con sus realizadores.
9. Sus mejores historias han surgido al calor de tertulias de bar y sobremesas opíparas. Siempre ha desmitificado su trabajo ("Es un despropósito que me atribuyan un cine propio, yo escribo para los directores con los que trabajo").
Respecto a su fructífera colaboración con Luis García Berlanga, Azcona comenta: "Hablamos mucho en establecimientos públicos. De cualquier cosa menos del guión y sin tomar notas. Pasado un tiempo prudencial, o sea, meses, estructuramos la historia con lo que se ha salvado del olvido y me voy a casa a escribir".
10. El director José Luis García Sánchez le definió de esta manera: "Una joya insustituible de la literatura y el cine españoles: ha dado testimonio de lo que ha ocurrido en este país durante el franquismo, la transición y nuestros días".
10. El director José Luis García Sánchez le definió de esta manera: "Una joya insustituible de la literatura y el cine españoles: ha dado testimonio de lo que ha ocurrido en este país durante el franquismo, la transición y nuestros días".
Yo le debía este post a Rafael Azcona. Y qué mejor día que hoy, Día del Libro, para rendirle mi pequeño homenaje.
Gracias, Rafael, por compartir tu arte con nosotros.