La idea del argumento de “West Side Story” le llegó al
coreógrafo Jerome Robbins al preguntarle un amigo cómo actualizaría él la obra "Romeo y Julieta" de Shakespeare.
Jerome Robbins y Leonard Bernstein comenzaron a desarrollar
la obra teatral de “West Side Story” en 1949, concibiendo para ella la idea de
un amor imposible entre un chico católico y una chica judía separados por la
intolerancia de la religión. La obra se iba a llamar “East Side Story”. Pero se
quedó en un proyecto más.
Seis años más tarde, Robbins y Bernstein retomaron la idea
de la obra. Para entonces, Manhattan había experimentado una enorme influencia
de puertorriqueños que se habían ido asentando en la zona Oeste de la ciudad.
La obra varió entonces, cambiando el conflicto entre católicos y judíos por el
de americanos y puertorriqueños y pasándose a llamar “West Side Story”
La producción original de Broadway de "West Side
Story" se estrenó en el Winter Garden Theater el 26 de septiembre de 1957,
llegó a las 732 representaciones y fue nominada al Premio Tony en 1958 como mejor musical
Y el 18 Octubre de 1961, hace hoy ya 50 años, se estrenaba en
Nueva York su magistral adaptación cinematográfica.
Producida por Robert Wise para The Mirisch Corporation and Seven
Arts Productions, y dirigida por Jerome Robbins y Robert Wise, “West Side Story” contaba con un guión de Ernest Lehman que estaba basado en el libreto
que para el musical hizo Arthur Laurents, quien a su vez se había inspirado
libremente en la obra de William Shakespeare “Romeo y Julieta”.
La fotografía de Daniel L. Flapp y el montaje de Thomas
Stanford, unidos a los efectos visuales de Saul Bass y Linwood G. Dunn
redondeaban la grandeza de la película.
Grandeza que llegaba a su máxima expresión con la banda
sonora compuesta por Leonard Bernstein y Stephen Sondheim, sin duda alguna una
de las mayores joyas musicales de la historia del cine.
Audrey Hepburn fue la primera elección para interpretar a
María, la protagonista femenina de esta historia. Audrey no aceptó el ofrecimiento por encontrarse en ese momento embarazada de su entonces marido Mel Ferrer.
Bellísimo rostro ya bien conocido por el público americano
desde que debutara en la gran pantalla con tan sólo cinco años en “The moon is
down”, Natalie Wood ya había aparecido también en “Rebelde sin causa”,
“Centauros del desierto” y “Esplendor en la hierba” antes de que le fuera ofrecido el papel de
María en “West Side Story”, personaje por el que siempre será recordada.
En las canciones, Natalie fue doblada por Marni Nixon,
soprano estadounidense que también prestó su voz, entre otras, a Deborah Kerr
en “El rey y yo” y a Audrey Hepburn en “My fair lady".
La opción primera de Robert Wise para el personaje de Tony era Elvis Presley, pero el agente del cantante le aconsejó que desestimara el proyecto. Y el elegido entonces fue Richard Beymer, actor que debutó
en el cine en 1949 y más adelante se asomaría con frecuencia a la pequeña
pantalla en diversas series, siendo especialmente destacado su papel de
Benjamín Horne en “Twin Peaks”.
En “West Side Story”, Beymer fue doblado en sus canciones
por Jimmy Bryant, cantante, arreglista y compositor americano.
El extraordinario bailarín, cantante y actor americano George Chakiris daba
vida a Bernardo, hermano de María y líder de la banda de los Sharks. Chakiris
había debutado en el cine a los doce años en “Pasión inmortal” como uno de los
chicos del coro. “Los caballeros las prefieren rubias”, “Brigadoon”,
“Navidades Blancas”, “Luces de candilejas” y “¡Viva Las Vegas!” fueron otros
musicales en los que participó antes de conseguir un rotundo éxito con “West
Side Story”. Chakiris había dado vida a Riff (el líder de la
banda rival) en la producción londinense de la obra.
Anita, la novia de Bernardo, era magníficamente interpretada
por Rita Moreno, excelente actriz y bailarina americana que debutó en el cine
en 1950 y había aparecido ya en títulos musicales como “Cantando bajo la
lluvia” o “El rey y yo”. Rita fue doblada en la canción “A boy like that” por la
cantante americana Betty Wand.
Y Russ Tamblyn, que se había presentado al casting con la
intención de interpretar el papel de Tony, fue elegido finalmente para dar vida
a Riff, líder de la banda de los Jets.
Russ, que había debutado en la gran pantalla con catorce
años en “El muchacho de los cabellos verdes”, había participado para entonces en una larga
lista de películas. Y ya le habíamos conocido como Gedeón, el hermano pequeño
de “Siete novias para siete hermanos. Más adelante, también pudimos ver a
Tamblyn en “Twin Peaks” encarnando al Dr. Jacoby.
Seis miembros del elenco original de Broadway aparecieron en la
película: Carole D'Andrea, David Winters, Jay Norman, Tommy Abbott, Tony
Mordente y William Bramley. Pero la mayor parte del elenco original fue
rechazado para su versión cinematográfica por no adecuarse en cuanto a edad a sus respectivos
personajes.
La filmación de la película no se realizó únicamente en
exteriores. En Hollywood, siete enormes platós se encontraban en constante uso
para rodar y ensayar. Y el director de arte Boris Leven llevó a cabo la
construcción de más de 50 decorados.
“En el teatro, usamos decorados
extremadamente estilistas, los cuales por supuesto eran irreales, decorados que
no podían adaptarse a la versión cinematográfica de la obra. Esto supuso un
cambio de la coreografía a un decorado mucho más realista”
(Jerome Robbins)
Originalmente, Jerome Robbins se negó a trabajar en la
película a menos que pudiera dirigirla. Pero el productor Walter Mirisch no quería
entregarle las riendas por completo por no haber dirigido anteriormente un film.
Así que se decidió contratar también a Robert Wise, que nos
había dejado ya títulos como “Ultimátum a la Tierra” o “Marcado por el odio”, para
este fin. Robbins se ocuparía de las escenas musicales y Wise de la parte
exclusivamente dramática de la historia.
Para introducir a los espectadores en la dureza de las
calles, Robbins prolongó los primeros 16 segundos de baile de la obra de teatro
a los 45 utilizados en la película. “Sentía que me llevaría más tiempo, hablando en términos cinematográficos, seducir a la audiencia y adaptarles a la atmósfera…"
Los 22 actores que interpretan a los miembros de las bandas
de los Jets y los Sharks realizaron el número del “Prólogo” en el área de los
suburbios de Manhattan, incluyendo un edificio que más tarde se convertiría en
parte del Centro Lincoln. Los pantalones utilizados por los bailarines fueron hechos
con un material textil especial con el fin de proporcionarles la mayor
elasticidad posible en sus números musicales.
Jerome Robbins ensayó con todos ellos durante tres meses
antes de comenzar el rodaje. Y durante la filmación, siguió perfeccionando cada
día la coreografía. Todos los bailarines afirmaron después que nunca habían trabajado tan duro para una obra musical. Durante la producción, necesitaron
200 pares de zapatos.
Este perfeccionismo de Robbins, que le llevaba a filmar las
escenas musicales una y otra vez, llevó también a la película muy por encima de su presupuesto
original, alargando además en exceso su rodaje. Y Robbins fue despedido por la
productora, completando Wise el resto de la filmación.
A diferencia de la versión teatral, la cinematográfica no
iba a incluir un intermedio, por lo que se retocaron algunos números musicales
con el fin de mantener una línea ascendente en la tensión de la película.
“America”, originalmente creado pensando en Anita y sus
amigas, se convirtió en una representación de las frustraciones de los
puertorriqueños. “I feel pretty” fue introducida antes que en la obra de teatro
y el extraordinario "Cool" se intercaló cuando ya la tensión de la historia iba en aumento.
La letra de “Gee, Officer Krupke!” fue modificada para
asegurar la aprobación de la censura de Hollywood. Y la canción "One hand, one heart", que realmente fue escrita para "Candide", el anterior musical de
Bernstein, pero luego fue descartada, se recuperó para “West
Side Story”. Y completaban la película otros maravillosos números musicales como "Dance at the Gymn", "María" o "Tonight".
“West Side Story” obtuvo 10 Premios Oscar: mejor película,
mejor director (Robert Wise y Jerome Robbins), mejor actor secundario (George
Chakiris), mejor actriz secundaria (Rita Moreno), mejor dirección artística,
mejor fotografía, mejor montaje, mejor diseño de vestuario, mejor banda sonora y mejor sonido. Y también fue nominada al mejor guión adaptado.
Se convertía así en la película musical con mayor número de
premios de la Academia, superando el récord establecido en 1958 por "Gigi" y sus 9
galardones.
Y fue, además, la primera película en ganar un Oscar al
mejor director siendo otorgado a dos directores (Robert Wise y Jerome Robbins).
Esto no ocurriría de nuevo hasta 2007, año en el que Joel Coen y Ethan
Coen compartieron el premio por la dirección de “No es país para viejos”.
También fue reconocida “West Side Story” con 3 Globos de
Oro: mejor película, mejor actor secundario (George Chakiris) y mejor actriz
secundaria (Rita Moreno), siendo además candidata en las categorías de mejor
director (Robert Wise y Jerome Robbins) y mejor actor (Richard Beymer). Robert
Wise y Jerome Robbins obtuvieron, además, el Premio del Gremio de Directores de
América. Y la banda sonora fue galardonada con el Premio Grammy.
El coste de producción de “West Side Story” fue de 6
millones de dólares, pero la película obtuvo una recaudación en taquilla tres
veces superior. Y la banda sonora recaudó más dinero que ninguna otra de
Hollywood.
“West Side Story” fue la segunda película más taquillera de
1961, tan sólo por detrás de “101 dálmatas”.
“El baile no es algo real, pero la
mayoría de la acción que transcurre en “West Side Story” resulta extremadamente
realista, con dos bandas rivales luchando por su propia existencia. El
problema, entonces, fue unir los dos conceptos: la realidad y la espectacular
irrealidad”
(Jerome
Robbins)
A deWitt, a
A-B-C, a Marcos ,
a Alicia, a Roberto, a Manderly…
Y, por supuesto, a todo aquél que se
quiera apuntar
a este maravilloso musical.