lunes, 29 de noviembre de 2010

LESLIE NIELSEN

Ayer fue un día muy triste para el cine en general y la comedia en particular. Porque ayer nos dejaba, a los 84 años de edad, Leslie Nielsen, uno de los más grandes comediantes de la historia del séptimo arte.
  

Como Leslie William Nielsen aterrizaste en Regina (Canadá) el 11 de Febrero de 1926. Y eras sobrino del actor danés Jean Hersholt. Ya empezabas bien.

"¿Qué recuerdo de mis inicios? Pues te seré sincero: recuerdo el miedo. El miedo atroz que tenía de que de un momento a otro todos esos tipos que me rodeaban se dieran cuenta de que yo no tenía talento en absoluto

“Los intocables”, “Alfred Hitchcock presenta”,  “El fugitivo”, “Jim West”, “Bonanza”,  “La ley del revólver”, “El virginiano”, “Mash”, “Las calles de San Francisco”, “Ironside”…


Yo empecé haciendo televisión, muchísima televisión, y había dos tipos de papeles: comedia y drama. A mí siempre me tocaba el drama y en drama hay dos tipos de papel: o eres el bueno o eres el muerto.
Si no estabas en todos los capítulos no podías ser el bueno y si eras el malo acababas muerto tarde o temprano. Así que cada mes tenía que empezar de cero sintiendo el mismo pánico"
 

A mediados de los 50 llegaste a Hollywood, donde te ofrecieron el papel de galán en multitud de películas.

 

Fuiste el Comandante J.J. Adams en “Planeta prohibido”, el Coronel Stephen Bedford en “Furia en el valle”, el Coronel George Armstrong Custer en “The plainsman”, el Teniente De Ruse en “Beau Geste”, el Capitán en “La aventura del Poseidón”…

Y más series. “Kojak”, “Kung Fu”, “Cannon”, “Colombo”, “Los hombres de Harrelson”, “Vacaciones en el mar”, “Hotel”, “Se ha escrito un crimen”, “Autopista hacia el cielo”, “Las chicas de oro”…


"Siempre he sido muy divertido y me ha gustado la comedia.
Desde hace muchos años"
 

También supiste ser el Dr.  Rumack en “Aterriza como puedas” y el Detective Frank Drebin en “Agárralo como puedas".

Leslie es el actor más serio del mundo. No se da uno cuenta
de que está haciendo comedia
(David Zucker)


…el Padre Jebedaiah Mayii en “Reposeída”, Santa Claus en “Todo lo que quiero para Navidad”, el Coronel Chi en “Surf Ninjas”, Lucio Cinico en “Golfos de broma”…

Un tipo verdaderamente loco en la vida real, que se moría por gastarnos bromas dentro y fuera del plató. De hecho no nos podíamos mirar a los ojos, porque rompíamos en carcajadas. Me pasé todo el rodaje mirándole la oreja y él a mi la barbilla. Cuando descubrió mi truco se puso unos pendientes enormes tipo Carmen Miranda
(Mel Brooks)


… El conde Drácula en “Drácula, un muerto muy contento y feliz”, Dick Steele, Agente WD-40 en “Espía como puedas”, Quincy Magoo en “Mr. Magoo”, Ryan Harrison en “¡Vaya un fugitivo!”, El Presidente Harris en “Scary Movie 3 y 4”…

"Ni Penélope Cruz ni Javier Bardem ni nada de nada. No he visto ninguna película española"
¿Ni siquiera a Pedro Almodóvar?
"Al-mo-do-var... tiene nombre de ogro gigante.... No, no me suena"
 

Y el Doctor Nielsen en “Spanish Movie”.

Pero fuiste también considerado para interpretar a Willy Wonka en “Charlie y la fábrica de chocolate” y a Messala en “Ben-Hur”.

"Hice los castings por todo el tema del contrato con MGM pero en cuanto vi las narices que gastábamos Charlton Heston y yo entendí que acabaría por cargarme la película (risas). ¿Sabes? ¡Mi nariz era incluso más grande que la suya! No, la verdad es que Heston tenía un talento increíble y yo entendí que no estaba preparado para ponerme a su altura, así que finalmente le dieron el papel a Stephen Boyd. En aquellos tiempos no tenía tiempo de ponerme a pensar cuál era el secreto para saber si una película funcionaba o no, así que aquello no me afectó especialmente. Nunca he sido un tipo ambicioso"
 

Y para dar vida a Jack Torrance en “El resplandor”. Esta versión tuya sí hubiera sido digna de verse.

"Cuando quieres hacer humor, tienes que conseguir que el público se ría antes que tú. Hacerles llegar la sensación de que tú no esperas el portazo en la puerta, o la frase absurda que deja a todos descolocados. El público tiene que sentir que 'te ha pillado' para que el chiste funcione. Tienes que ser serio para hacer humor"
 

Desde este blog, Leslie, sólo quiero darte las gracias de todo corazón. Una y mil veces. Por todas y cada una de tus apariciones. Por contagiarnos con tu natural y desbordante simpatía. Por tu sano y envidiable sentido del humor. Por tu gran arte a la hora de hacernos reir.

En definitiva, por no dejar nunca de ser Leslie Nielsen. Pero para eso ya contábamos contigo.
 

"La gente me quiere, formo parte de sus vidas y a mí me encanta que sea así. Eso es la gran virtud del humor, que la gente te relaciona con los buenos momentos, con sus buenos momentos. Mucha gente, en todo el mundo, me para por la calle y se dirige a mí como Frank [por Frank Drebin, mi personaje en la trilogía de “Agárralo como puedas”] y eso me hace sentir orgulloso porque significa que he conseguido transmitir algo. ¿Sabes? Siempre he considerado “Aterriza como puedas” y las tres partes de “Agárralo...” como mi particular pirámide, el monumento que siempre estará ahí, lo que la gente recordará cuando me haya ido: nunca podrán quitarme eso".
(LESLIE NIELSEN)

miércoles, 24 de noviembre de 2010

DINO DE LAURENTIIS

El pasado 10 de Noviembre nos dejaba todo un personaje de la historia del cine. El productor italiano Dino de Laurentiis se nos iba, a los 91 años de edad, habiéndonos regalado a lo largo de su prolífica carrera una exitosa y variopinta lista de películas.


Nacido el 8 de Agosto de 1919 en Torre Annunziata, Campania (Italia) como Agostino de Laurentiis, dejó a los 17 años su casa para ingresar en el Centro Sperimentale de Roma, donde cursó estudios de cine trabajando luego como actor, extra o cualquier otra ocupación que estuviera relacionada con la industria fílmica.

A los 20 años ya había producido su primera película y, tras un paréntesis en el que sirvió a su ejército durante la Segunda Guerra Mundial, volvió al mundo del cine centrándose ya en el terreno de la producción.


En la década de los 40 cosechó ya sus primeros éxitos como productor con títulos hoy ya clásicos de la cinematografía italiana como “Il bandito”. O “Arroz amargo”, con cuya recordada protagonista, Silvana Mangano, contraería matrimonio el productor ese mismo año.


Con el también productor Carlo Ponti, marido de esa otra diva del cine italiano llamada Sophia Loren, fundó Dino en 1948 la sociedad Ponti-De Laurentiis, que realizaría en 1952 la primera película italiana a color: “Toto a colori”.

De esta fructífera unión salieron, además, títulos como “Los tres corsarios”, “Ulises”, “Guerra y paz” o “Europa 51”.


Y también “La Strada” y “Las noches de Cabiria”, ambas dirigidas por otro grande, Federico Fellini, ambas protagonizadas por la maravillosa Giuletta Masina y ambas ganadoras del Oscar a la mejor película de habla no inglesa.

En 1959, ya disuelta su asociación con Carlo Ponti, De Laurentiis fundó su propia compañía, Dino de Laurentiis Cinematográfica, para la que construyó cerca de Roma los estudios Dinocittá.

 

De aquí salieron películas espectaculares como “Barrabás”, “La Biblia”, “Romeo y Julieta” o “Waterloo”, así como comedias populares como “La gran guerra”, “Las brujas” o “Sembrando ilusiones”.


Obligado a cerrar Dinocittá debido a la crisis de la industria cinematográfica, De Laurentiis decidió trasladarse a los Estados Unidos, donde fundó a mediados de los años 70 De Laurentiis Entertainment Group, una nueva productora de donde salieron películas de gran éxito como “Sérpico”, “King Kong” o “Ragtime”.

Fellini, De Laurentiis y Ponti. Dios los cría…

En 1954, Federico Fellini recibía el León de Plata en el Festival de Venecia por “La Strada”.

Fellini, Giuletta Masina y De Laurentiis... Y ellos se juntan.

En 1957 recibían De Laurentiis y Carlo Ponti el Oscar a la mejor película de habla no inglesa también por “La Strada”.

Los italianos David di Donatello Awards reconocieron también el trabajo de producción de Dino en 1957 (“Las noches de Cabiria”), 1961 (“Todos a casa”), 1966 (“La Biblia”), 1968 (“Banditi a Milano”) y 1971 (“Waterloo”).


Y en 2001, la enorme labor cinematográfica de Dino De Laurentiis era rubricada por los Premios de la Academia con el Irving G. Thalberg Memorial Award de manos de su gran amigo Anthony Hopkins, con el que coincidió en títulos como “Motín a bordo”, “Hannibal” o “El dragón rojo”.

Pero Dino ha sido también galardonado por el conjunto de su carrera en otros certámenes. En 1997 recibía el Lifetime Achievement Award en los Academy of Science Fiction, Fantasy & Horror Films americanos, en 2002 “The General” Hororary Award en el Festival de Sitges y en 2003 el Career Golden Lion en el Festival de Venecia.


Dino de Laurentiis produjo a lo largo de su carrera más de 166 trabajos, intercalando siempre películas de gran calidad con otras de gran éxito comercial.

“El juicio universal”, “La batalla de las Ardenas”, “Barbarella”, “Los secretos de la cosa nostra”, “Los tres días del cóndor”, “El huevo de la serpiente”, “Flash Gordon”, “Conan, el bárbaro”, “La zona muerta”, “Motín a bordo”, “Dune”, “Manhattan Sur”, “El ejército de las tinieblas”, “Terciopelo azul”, “Hannibal”, “El dragón rojo”...


Lo dicho, todo un personaje de la historia del cine. Gracias, Dino.

Si una película fracasa es mi responsabilidad, si tiene éxito es por el trabajo conjunto de actores, director, escenógrafo y vestuaristas. Todos menos el productor. Así lo acepto

(DINO DE LAURENTIIS)

miércoles, 17 de noviembre de 2010

El legado de Berlanga

Fernando Fernán Gómez, Rafael Azcona, Agustín González, José Luis López Vázquez, Manuel Alexandre, Berlanga… En los últimos años se nos están muriendo grandes de nuestro cine. Se pierde una gran generación de cómicos
(José Sacristán)


El pasado Sábado se nos iba, a los 89 años de edad, Luis García Berlanga, una página fundamental en la historia de nuestro cine.

  

Como alcalde vuestro que soy, os debo una explicación
(Pepe Isbert en “Bienvenido, Mr. Marshall)
 

"La primera sinopsis que escribimos Bardem y yo era un drama rural. Los productores nos dijeron que por qué no hacíamos algo más divertido. Posteriormente, nos decidimos por la historia de un pueblo que soporta la invasión a base de halagar a los invasores, hasta ir evolucionando hasta lo que finalmente es la película. Una vez que Juan Antonio Bardem y yo terminamos el guión, Miguel Mihura, con la aquiescencia nuestra, pule los diálogos y escribe las letras de las canciones. Mihura hizo un estupendo trabajo de dialoguista"
 

Nacido el 12 de Junio de 1921 en Valencia, Luis García Berlanga Martí nunca sufrió penurias económicas, ni en su Valencia natal ni en Madrid, adonde llegó pensando en ser pintor o arquitecto y donde acabó formando parte de la primera promoción que salió de la Escuela de Cine.

"Nos ofreció un espejo en el que mirarnos y ahí nos vimos diferentes por primera vez. Gracias a sus películas nos conocemos mejor"
(José Luis Borau)
 

"El sonido directo es lo más ‘antiberlanga’ que se ha inventado. Parece que lo inventaron para fastidiarme. Si tienes que mover el decorado de sitio para hacer esos planos-secuencia tan complicados míos y luego colocar todo en su lugar, se hace ruido y eso con sonido directo se oye todo. Hay gente que dice que mis películas hay que verlas dos o tres veces porque hay escenas simultáneas que se puedan perder en una primera visión, puesto que el espectador no es capaz de estar atento a tres cosas a la vez”


Los Jueves, milagro” se estrenó el 2 de Febrero de 1959 en el madrileño cine Capitol, donde tan sólo permaneció diez días en cartelera. La versión que se estrenó de la película estaba notablemente mutilada. Entre los cortes más notables, se suprimió la noticia sobre la Virgen de Fátima que aparece en el periódico que lee Don Ramón al comienzo del metraje.


¡Milagro!¡Milagro! A mí, a mí se me ha aparecido, yo lo he visto. Vendrá todos los Jueves, lleva corona y estrellas, y una palmera que anda
(Manuel Alexandre en “Los Jueves, milagro”)
 

Pepe Isbert era un verdadero monstruo como actor. Tenía una forma única de estar, de hablar, de mirar, de moverse. Nunca le tuve que explicar un personaje, lo cual era una gran ventaja para mí porque yo nunca sé qué decir a los actores de sus personajes. Se aprendía el papel enseguida y se amoldaba muy bien a mis improvisaciones


Berlanga ensayaba mucho antes de rodar y repetía las tomas tantas veces como podía. Y casi nunca por los actores protagonistas, sino por los que están en segundo plano, por el “ambiente”. Siempre creyó que la clave estaba en la atmósfera y que eso se creaba con los figurantes.
 

Como persona era la inteligencia en estado químico puro…
A veces era difícil seguirle…"
(José Sacristán)
 

Jose Luis - “¡No lo volveré a hacer! ¿Entiendes?”
Amadeo - “Sí, yo también dije lo mismo la primera vez...”
(Nino Manfredi y Pepe Isbert en “El verdugo)

Para su propia boda, Luis García Berlanga pidió una ceremonia sencilla. Como antes que la suya se había celebrado una boda de postín, mientras ellos se casaban los monaguillos iban retirando alfombras y flores de la iglesia. La escena real la plasmó después el director en la película “El verdugo”.

Berlanga era grande en sí mismo pero formando pareja con Azcona era una fórmula magistral, la combinación perfecta. Su cine es el mejor testimonio de la historia de España en la segunda mitad del siglo XX
(José Luis García Sánchez)


Todo el mundo me dice que Rafael Azcona y yo no debemos trabajar juntos, que a mí no me va, lo mismo que supongo que a Azcona le dirán sus hinchas que no le voy como director, que le va mejor Ferreri, no sé.. Pero el caso es que yo por ahora me siento adscrito a su manera de pensar y de sentir las cosas.
Rafael es el hombre más importante de mi vida. Se trata del concepto de amistad más profundo que pueda entenderse
 

Lo que yo he unido en la tierra no lo separa ni Dios en el cielo
(Agustín González en “La escopeta nacional”)


"Con este señor se trabajaba de una forma estupenda. Era perfecto, rodaba con mucha simpatía y tranquilidad. No es de los que llegaba sin saber lo que hacer
(José Sazatornil)
  

"Al llegar a mi cuarta película comprobé que en las dos anteriores, por azar, había metido la palabra ‘austrohúngaro’, que ya de por sí es muy rara, y había salido de una manera lúcida en esas películas. Entonces me dije: “Voy a adoptar esta palabra tan divertida que ya ha salido dos veces”, y la adopté como fetiche, como palabra talismán


Calabuch es ese lugar donde la gente aún puede vivir con sentido del humor, con amistad, esperando a la muerte como a una vieja amiga que llega a pie, sin prisas, llevándoselo uno a uno, en lugar de venir silbando por el aire y matar de un estallido a medio mundo. Esto es Calabuch.


Matías tiene a veces su mal genio, como todo el que tiene que mandar. Pero en el fondo no es malo, no es tan fácil ser carabinero. Yo estuve a punto de serlo, pero había que estudiar tanto…
(Franco Fabrizi en “Calabuch)


Su cine resiste al tiempo porque está hecho seriamente, de verdad. Se reconoce al autor sin que sus señas de identidad sean exageradas. Prevalece el talento y eso es un intangible sobre las historias que cuenta
(Gonzalo Suárez)


En este mundo no hay caridad, ni nunca la ha habido, ni nunca la habrá
("Plácido")

Plácido” se iba a haber llamado “Siente a un pobre a su mesa” pero la censura de la época no se lo permitió a Berlanga. El director fue nominado a la Palma de Oro en el Festival de Cannes y el film candidato a la mejor película extranjera en los Oscar de Hollywood. La ganadora fue “Como en un espejo” de Ingmar Bergman.

No se puede explicar, ni entender el cine español sin Berlanga
(Imanol Uribe)
 

A lo largo de su fructífera carrera, Luis García Berlanga recibió, entre otros galardones, el Premio Nacional de Cinematografía, la Medalla de Oro de las Artes, el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, el Premio Especial Homenaje de la ADIRCAE (Asamblea de Directores y Realizadores Cinematográficos y Audiovisuales) y el Premio Goya Honorífico.


Gracias, Luis, por hacernos herederos de tu valiosísimo legado cinematográfico. Gracias por “Plácido”, “El verdugo”, “Los Jueves, milagro”, “Calabuch” y “Bienvenido, Mr. Marshall”, cinco auténticas joyas del cine español.


Gracias por haber unido tu maestría a la de otro fenómeno de nuestro cine, Rafael Azcona, con quien, estoy segura, ya estás preparando un nuevo proyecto ahí arriba.


Y gracias también por “Esa pareja feliz”, “Novio a la vista”, “¡Vivan los novios!”, “La escopeta nacional”, “Tamaño natural”, “La vaquilla”…

Un Berlanga no se aburre nunca. Le basta con su cabeza

(LUIS GARCÍA BERLANGA)

sábado, 13 de noviembre de 2010

Hasta que llegó Jack Elam

Al poco tiempo de llegar a Hollywood, Jack Elam se convirtió en uno de sus mejores actores de reparto gracias, sobre todo, a sus grandes caracterizaciones de villano, principalmente en el género cinematográfico del western.


El 13 de Noviembre de 1920, William Scott Elam nacía en Miami, ciudad del condado de Gila (Arizona). Al poco de nacer él moría su madre, siendo entonces acogido por varias familias que le hicieron ganarse su propio sustento, por ejemplo, recogiendo algodón con tan sólo seis años de edad.

A los nueve regresó con su padre, que vivía en California. Contable de profesión, el padre se estaba quedando ciego y tenía dificultades para realizar su trabajo, con lo que contaba con su hijo para rellenarle los impresos. A los doce años, en un campamento infantil, William sufrió un accidente que le dejó inmóvil su ojo izquierdo.


Más adelante, la formación con su padre y los cursos de contabilidad en la escuela universitaria le ayudaron a conseguir trabajo como contable en el Bank of America de Los Ángeles y en la Standard Oil Company.

Tras dos años en la Armada durante la Segunda Guerra Mundial, se convirtió en contable independiente para Samuel Godwyn Studios. A cambio, el estudio cinematográfico le daría la oportunidad de iniciarse en pequeños papeles como actor, profesión con la que finalmente se quedaría William al ser advertido por su médico de que perdería la vista de manera permanente si seguía fijándola en los libros de contabilidad.

Con el nombre artístico de Jack Elam debutaba en la gran pantalla en 1944, dando vida a The Killer, en el corto del Oeste “Trailin’s West”.


Tras una larga serie de largometrajes, muchos de ellos del género western, en 1952, a las órdenes de Fritz Lang, compartía cartel con Marlene Dietrich y Mel Ferrer en “Encubridora”.


Y ese mismo año era dirigido por Fred Zinneman como Charlie, el borracho de la cárcel que custodiaba Gary Cooper en “Solo ante el peligro”.


Un año más tarde, en 1953, Elam rodaba “Una vida por otra”, esta vez junto a Robert Taylor y Anthony Quinn.


Y, dirigido por Anthony Mann, compartía cartel en 1954 con James Stewart y Walter Brennan en “Tierras lejanas”.

Luego vendría “Veracruz”, con Gary Cooper y Burt Lancaster. Y “Los comancheros”, junto a John Wayne y Lee Marvin. Y su personaje de Cheesecake en “Un gángster para un milagro”, a las órdenes de Frank Capra.


En 1968 formaba parte de la temida banda de Henry Fonda en “Los malvados de Firecreek”.


Y ese mismo año repetía cartel junto a Fonda, y formando también parte de su banda, en esa obra maestra de Sergio Leone llamada “Hasta que llegó su hora”.


Un año más tarde, en 1969, descubríamos el lado más cómico de Jack Elam en la brillantemente divertida “También un sheriff necesita ayuda” donde, bajo las órdenes de Burt Kennedy,  el actor participaba en esta parodia sobre el cine del Oeste como Jake, el único que se ofrece a ayudar al sheriff precisamente porque es el tonto del pueblo.


Junto a Elam, un magnífico James Garner en el papel del sheriff y un reparto secundario de lujo encabezado por Walter Brennan, Bruce Dern y Harry Morgan.


Y en 1973, en el papel del abuelo de la familia Tiflin, Jack volvía a coincidir con Henry Fonda en “El potro alazán”, adaptación televisiva de la novela homónima de John Steinbeck.


En la pequeña pantalla también se hizo Jack Elam un rostro familiar en series de televisión como “The Dakotas” y “Struck by lightning”. Pero apareció también como actor invitado en muchas otras, como “El hombre del rifle”, “La ley del revólver”, “Los intocables”, “Bonanza”, “El gran chaparral”, “El virginiano”, “Kung Fu”, “La conquista del Oeste”, “Grizzly Adams”, “Con ocho basta”…

En 1983 le fue muy merecidamente otorgado un Golden Boot en los Golden Boot Awards, galardones que entrega la Motion Picture & Televisión Fund a aquellos actores que han contribuído de manera significativa a mejorar el género del western.

Tristemente, este entrañable actor nos dejaba, a la edad de 82 años, el 20 de Octubre de 2003. Legándonos, eso sí, una interesantísima filmografía. Gracias, Jack.


En la vida real, Jack Elam era conocido por ganar siempre en los juegos de azar, por su naturaleza sociable en los platós de cine y por su gran ética en el trabajo.

Y en la gran pantalla nos demostró una enorme credibilidad en sus papeles de villano. Porque, hasta mediados de los años 40, el cine del salvaje Oeste echaba en falta un elemento…


Hasta que llegó Jack Elam.

Muchas señoras se me han acercado y me han dado con el bolso por algo que me habían visto hacer en el cine"
(JACK ELAM)